Hoy arranca la Semana Europea de las Regiones y las Ciudades, el evento anual más importante centrado en la política de cohesión de la UE. Durante cuatro días, participan actores diversos, desde políticos y empresarios hasta representantes de la sociedad civil y el ámbito académico, para abordar los desafíos compartidos por las regiones europeas y evaluar los logros alcanzados.
La política de cohesión es la estrategia de la UE para fomentar un desarrollo equilibrado en todos sus Estados miembros, apoyando a las regiones menos desarrolladas para que se pongan al nivel del resto. En los últimos cinco años, ha logrado resultados como el apoyo a 2,7 millones de empresas, la mejora de infraestructuras educativas para 18 millones de niños, la creación de 260,000 empleos, y la optimización de la eficiencia energética en 380,000 hogares. También ha fortalecido la conectividad de banda ancha para 3,1 millones de hogares y ha ayudado a 12,8 millones de personas en actividades educativas.
Este enfoque es crucial para reducir las desigualdades entre regiones, una prioridad desde la creación de la política regional en 1957 con el Tratado de Roma, que sentó las bases para la formación del Fondo Europeo de Desarrollo Regional en 1975.